Si cae ceniza volcánica protege tu coche

Ahora que el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) incrementó la alerta volcánica del Popocatépetl de amarillo fase 2 a amarillo fase 3, es cada vez más probable que ante el aumento en la actividad del volcán sea más probable la posible caída de ceniza en las zonas aledañas al “Popo”, entre las que se incluye la ciudad de México.

Vayamos por partes: La ceniza volcánica es el resultado de la pulverización de rocas expulsadas en una nube de vapor y gases, capaz de derrumbar techos, bloquear carreteras y sistemas hidráulicos. Sus gases pueden lesionar los pulmones y generar problemas respiratorios.

Pero así como las personas pueden ver perjudicada su salud al exponerse a la ceniza, los autos tampoco están exentos de salir indemnes, en especial por los materiales ácidos de los que está compuesta la ceniza.

A continuación, te damos algunos consejos básicos, pero que necesariamente hay que seguir, para salvaguardar tu vehículo y evitar una inversión extra en reparaciones:

1. En la medida de lo posible, trata de no hacer uso de tu auto, ya que el pavimento se vuelve resbaloso y la visibilidad, muy difícil, además de que la ceniza puede dañar el motor y su rendimiento. Si te es posible, trata de resguardarlo en un estacionamiento techado o bien cubrirlo.

Si no tienes otra forma para transportarte, maneja a baja velocidad y con las luces encendidas, sin dejar de estar alerta con lo que ocurre a tu alrededor.

2. Nunca, bajo ninguna circunstancia, limpies tu coche con un trapo seco ni trates de lavarlo únicamente con agua, porque las partículas de la ceniza pueden perjudicar su pintura. Antes de comenzar, utiliza cubrebocas para que tengas el menor contacto posible con la ceniza y el polo.

Lo ideal para quitar el exceso de ceniza de la superficie es hacerlo con agua, jabón especial o shampoo con pH neutro (que tiene un tratamiento más delicado que los jabones “normales”) y una esponja, además de mantenerlo húmedo al lavarlo para aminorar el riesgo de rayones.

Recuerda también que el lavado debe incluir al motor y al radiador. Posteriormente, puedes aplicar cera en la pintura para una mejor protección.

3. Todas las partes de tu vehículo deben quedar libres de ceniza; sin embargo, hay tres que tienes que revisar exhaustivamente: el parabrisas, el sistema de filtro de aire que se conecta con el motor y los neumáticos.

Para el primer caso, debes limpiar los limpiaparabrisas cada que sea posible, mientras para que el segundo, habrá que cumplir con un servicio de mantenimiento o de revisión, el cual incluye cambio de filtro de aceite y de aceite en sí.

Una revisión extra no está por demás, ante el riesgo de sobrecalentamiento del propulsor. En cuanto a las llantas, una opción es utilizar cremas lubricantes o líquidos selladores que extenderán su vida útil.

Otras zonas que tampoco se tienen que perder de vista son los frenos, gracias a que los calipers, pastillas y pistones están sujetos a sobrecalentarse y, por consiguiente, dañarse.

5. Si te encuentras en una zona muy cercana a un volcán, no solo te expones a la ceniza, sino también al material incandescente que pueda arrojar; por lo tanto, debes resguardarte en un lugar seguro y seguir las recomendaciones que las autoridades emiten periódicamente. Si recibes permiso de evacuar tu vivienda en auto o moto, hazlo; si no hay condiciones de manejar, espera instrucciones.