Un Dakar antes del Dakar “La Aventura” - Team Azimut
Existen cientos de historias detrás de un Rally Dakar, esta es la del Team Azimut desde Venezuela, narrada por Nunzio Coffaro, piloto principal y director del equipo.
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Team Azimut inició su Dakar desde el 11 de Diciembre, fecha en que parte desde Barcelona – Venezuela con una flota de tres Toyota Hilux, tres camiones Iveco y una Toyota Hilux de competencia sobre un tráiler. Además de una tripulación de quince personas, con destino Buenos Aires – Argentina donde será la largada del Rally más famoso y difícil del mundo, el Rally Dakar Argentina Bolivia (del 3 al 16 de enero). Team Azimut es el equipo que más kilómetros recorrerá para llegar a la largada del Rally.
Con dificultades para enviar la flota vía marítima, Team Azimut lograba en ediciones anteriores llevar su flota vía terrestre a través de la ruta del pacifico cruzando los países de Colombia, Ecuador, Perú, Chile y finalmente Argentina, pero hoy en día debido a que la frontera Venezuela y Colombia continúa cerrada tuvimos que buscar otra alternativa. La vía transamazónica de Brasil fue nuestra mejor opción, desde su planificación se mostró como una gran aventura recorrer 6.900 Km en 15 días, atravesando Brasil. Incluyendo cuatro días de cruce de Chalana del río Negro y río Amazonas. Aquí inicia la Aventura.
Desde muy temprano el equipo se reúne, provenientes de todas partes del país en Barcelona – Venezuela para tomar el timón de cada vehículo de la flota y partir al sur. Con algunas paradas en el camino fuimos descontando kilómetros a nuestro destino Buenos Aires. La primera pausa fue para descansar en Upata, la segunda parada y despedida de Venezuela fue en Santa Elena de Guiare. Atravesamos la frontera entrando a Brasil, y nos encontramos con con la grata sorpresa de la sencillez de los transmites del cruce de frontera gracias a los convenios Mercosur además de una hermosa carretera que nos llevó hasta nuestra primera pausa para descanasar en Brasil, Rorainopolis un pueblo que linda con una gran reserva indígena que no permite el paso durante la noche. Así que a la mañana siguente nos levantamos muy temprano con destino a Manaos donde nos aproximábamos a nuestro primer reto, elegir la mejor opción de ruta (BR-319, BR-163, o Caminos de Belém) cada una mostraba sus ventajas y desventajas.
Con la ayuda de amigos brasileños tomamos la decisión que más nos convendría, dos días de Chalana y cruzar la BR-163, inclusive cuando sabríamos que tendríamos cientos de kilómetro de carretera de tierra, puentes de madera y con el invierno y sus fuertes lluvias aproximándose. Embarcamos los autos y abordamos el barco con la premura que requeríamos. Fueron dos días sometidos a las
incomodidades de la Chalana además de que la alimentación e hidratación ofrecidas por ellos nos produjo malestar estomacal a toda la tripulación del equipo.
Desembarcamos en Santarém y sin titubear nos adentramos en la BR-163 cruzando la selva Amazónica, las tripulaciones dieron la talla al sortear miles de obstáculos (Puentes de Maderas muy deteriorados, dificultad de mantener la flota sobre la vía por lo resbaladizo del barro, cortinas de polvo y una gran cantidad de tráfico pesado sobre la misma trilla en ambos sentidos) hasta llegar a Cuiabá donde descansaríamos. Satisfechos de nuestro ritmo nos levantamos muy temprano a revisar toda la flota y continuar nuestro camino a la frontera con Argentina, donde nos enfrentamos a un largo proceso de aduanas en Foz de Iguazu que tardó alrededor de 20 horas. Una vez cruzada la frontera nos sorprendió la excelente vialidad de Argentina pero con fuertes tormentas de lluvias, truenos y relámpagos. Ya se sentía que estábamos en la latitud sur, con sus días largos y noches cortas típicas de estas fechas decembrinas con ansias de llegar a nuestro destino. Repetimos el ritmo con intercambio de las tripulaciones día y noche sin parar a descansar para finalmente encontrarnos con nuestro destino final, Buenos Aires contabilizando 11 días 6.300km de carretera y 700 km en chalana y nuestro primer objetivo cumplido, mejorando nuestras expectativas, ahora nos toca descansar y recuperar nuestra salud estomacal.
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Fotos y texto. Nunzio Coffaro – Team Azimut