El futuro llegó: Autos que se conducen solos

La tecnología aplicada a los autos ha avanzado a puntos que hace algunos años sólo soñábamos a los autos que se conducen por sí solos; ahora son ya prácticamente una realidad.

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NO TAN RÁPIDO

Decimos “prácticamente” porque todavía hay ciertas restricciones y aunque los autos todavía no son 100% autónomos ya hay varios que pueden hacer el trabajo casi completamente por su cuenta.

Fabricantes como Volvo y Tesla están llevando esta tecnología a los usuarios mucho antes de lo que esperábamos y aunque cada sistema tiene sus características propias, todos funcionan bajo los mismos principios.

EL CASO DE VOLVO

El sistema IntelliSave Autopilot de Volvo, por ejemplo, utiliza una gran cantidad de equipo que le permite a los autos de la marca sueca conducirse de manera autónoma. Este sistema cuenta con cuatro cámaras inteligentes que pueden detectar objetos cercanos al vehículo al mismo tiempo que monitorean las líneas de los carriles en el piso.

Aparte de las cámaras, también encontramos 4 radares, dos adelante y dos atrás, que crean un campo de 360 grados alrededor del auto. Los radares traseros ayudan a hacer los cambios de carril al detectar si hay otro vehículo aproximándose.

Para ayudar a los radares encontramos 12 sensores ultrasónicos que se encargar de detectar objetos alrededor del auto a bajas velocidades.

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AUN HAY MÁS

Todavía no acabamos. También hay un sistema de escaneo láser en el frente del auto con un alcance de hasta 150 metros que nos ayuda a detectar posibles obstáculos en nuestro camino. Si todo esto no fuera suficiente, el sistema IntelliSave se apoya en todo momento por un GPS de alto desempeño que sabe en todo momento exactamente en dónde está el auto y las cosas que hay a su alrededor.

Son muchas las piezas que tienen que funcionar perfectamente para que un auto se maneje sólo, pero estamos cada vez más cerca de hacer de esta tecnología algo común. A pesar de que parece que hay sistema sobre sistema para proteger a los ocupantes, hay que recordar que esta tecnología todavía es nueva y tiene fallas.

Hace poco se registró el primer accidente mortal de un usuario de un vehículo autónomo. Aunque estos autos se manejen con la menor cantidad de errores posibles, todavía tienen que compartir las calles con autos conducidos por personas.

También está el aspecto ético de darle el control de 2 toneladas de metal que viajan a 100 km/h a una computadora. Hipotéticamente hablando, imaginemos que un vehículo autónomo tendrá un accidente contra otro vehículo y la única manera de evitar este impacto que será mortal para los ocupantes, el auto debe maniobrar y subirse a la banqueta.

Pero en la banqueta hay una señora… con una carreola, y evidentemente subirse a la banqueta significa arrollar a la señora con su bebé y seguramente matarlos. ¿Cómo decide el auto qué hacer? ¿Protege a sus ocupantes o a la gente de afuera?

Sabemos que es un caso extremo, pero también sabemos que puede suceder. Los fabricantes tienen que pensar en todo este tipo de cosas porque al final del día, aunque no estamos hablando de inteligencia artificial (todavía), estamos poniendo nuestras vidas y las de la gente que nos rodea en las manos de una computadora.

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La conducción autónoma es muy prometedora y servirá mucho para disminuir el tránsito y los consumos, pero todavía estamos en las primeras etapas. Afortunadamente casi todas las marcas están experimentando con esto de una forma u otra, y otras como Volvo no se esperaron a que “se pusiera de moda” para intentarlo y le han ganado la carrera a muchos otros, ofreciendo autos con conducción asistida.

CUÉNTANOS…
¿Estás de acuerdo con que existan este tipo de vehículos?
¿Tendrías un auto que se conduce solo?